La espuma de los días (L’écume des jours) de Michel Gondry
La novela «L’écume des jours», muestra que es posible hacer algo que llame a la imaginación sin ser completamente oscuro. Es una lectura que me liberó: mi imaginación, mi creatividad se reforzaron. Con Vian, y con otros obviamente también, yo desarrollé mi estilo…
Michel Gondry, 2013
La espuma de los días está basada en la novela homónima de Boris Vian publicada en 1947. Esta historia poética y creativa, narra un universo fantástico en el cual la realidad aparece distorsionada.
Por lo cual, Michel Gondry era el cineasta más indicado para realizar una película como esta. La espuma de los días sigue el formato de películas anteriores de este cineasta, y como en La Ciencia de los Sueños (2006), crea un mundo de ficción alrededor de Roman Duris, tal como antes lo hizo con Gael García. El imaginario de Collin (Duris) es ensoñador, mediante una estética y un decorado que le da vida a objetos bizarros como el timbre de su casa y a espacios mágicos como su departamento con vista a todo París o los vehículos fabulosos en los cuales se desplaza.
El film surrealista y onírico de Gondry narra la historia de Collin (Romain Duris), un joven creativo, que posee una fortuna tan grande que no necesita trabajar. Cuando su mejor amigo Chick le cuenta que está enamorado de Alise, él decide enamorarse también. Poco después, en una fiesta de cumpleaños conoce a Chloé (personificada por Audrey Tautou), de quien se enamora. Chloé representa para él la música de Duke Ellington, puesto que él es amante del jazz y Chloé es el nombre de una de las canciones de Ellington. La relación idílica y la vida de ambos que parecía perfecta, comienza a desmoronarse cuando Chloé se enferma y un doctor descubre que es a causa de un nenúfar que crece en uno de sus pulmones.
La película tiene toques de humor, con personajes como Chick, el mejor amigo de Collin, fanático de la filosofía de Jean-Sol Partre (Sartre) y aunque Chick no entiende mucho de filosofía, pasa sus días buscando libros de este autor que lo llevarán rápidamente a la quiebra.
El reparto de la película es excepcional, puesto que la película está protagonizada por las estrellas del cine francés: Romain Duris, Andrey Tautou, Omar Sy y Gad El Maleh. Además, la película cuenta con escenas soberbias, como cuando la pareja viaja por París en una nube o las escenas en las cuales los mecanógrafos escriben en masa la novela de Boris Vian. En esta última escena, Gondry cita voluntaria o involuntariamente la cadena de reproducción de Tiempos Modernos de Chaplin desde una versión surrealista y al mismo tiempo crea una mise en abyme o «puesta en abismo» escribiendo el libro dentro del libro o más bien, dentro de la película.
La adaptación de la película logra captar el universo mágico de Vian. Sin embargo, la historia parece un sinfín de creaciones hilarantes usando la técnica del stop-motion, sin lograr sumergirse realmente en la historia y emocionar al espectador. Puesto que después de una media hora de efectos especiales uno se pregunta cuándo comenzará la película. Lamentablemente, la historia y los diálogos son secundarios para Gondry, quien privilegia la imagen, la música y la fotografía.El Guillatún
Yo había esperado tener 23 años para escribir. Eh, los jóvenes. Es la abnegación. Después, yo intenté contarle a la gente historias que no habían leído nunca. Estupidez pura, doble estupidez: a ellos les gusta lo que ya conocen; pero yo en cambio, no disfruto eso que ya conozco en literatura. En el fondo, yo me contaba las historias. A mí me hubiera gustado leerles en los libros de otros…
Bois Vian (Estracto de Diario contra la corriente. ©Cohérie Boris Vian, 1952)