La historia es esta: sucesivos crímenes en la ciudad de Viña del Mar llaman la atención de los medios de comunicación y de la ciudadanía. La Policía de Investigaciones detiene al presunto autor de los hechos, pero el caso da un vuelco y dos carabineros aparecen como los culpables, siendo condenados a pena de muerte.
Lo anterior, que parece un guión de ficción, es una historia real que tuvo lugar durante la dictadura militar, comenzando con el primer crimen en 1980 y finalizando con la muerte de los condenados en 1985.
El documental Pena de Muerte se divide en 10 capítulos y es guiado por el detective Nelson Lillo, el neuropsiquiatra Simeón Rizo Castellón, el periodista Ricardo Ruiz y la abogada Laura Soto. Ellos explican el proceso de investigación desde sus áreas de trabajo, se complementan y se interrumpen, creando algo parecido al diálogo.
Además de los archivos televisivos de UCV, Tevo Díaz filma algunas recreaciones de lo sucedido en Viña del Mar con cámaras Súper 8 y Betamax; otros asesinatos son explicados con mapas y dibujos. Estos momentos de la película se enmarcan en las características netamente policiales de la historia y se aprovechan recursos propios del cine negro, como la música, la fotografía y la aparición de los personajes.
Pero este documental no pretende ser solamente una representación de lo sucedido, sino que su fuerte está en la crítica que hace a la investigación, al proceso judicial, los medios de comunicación y al manto de la dictadura que cubre todo el relato. Los mejores momentos ocurren luego que se cuenta la historia y resaltan los vacíos y las contradicciones que ésta tiene. Todo a cargo de quienes investigaron los hechos, el que lo reporteó y la mujer que defendió a los inculpados.
Frente a una historia espectacular como ésta se podría pensar que la película ya estaba hecha. Afortunadamente para Tevo Díaz no fue así y exploró en distintos formatos para armar un relato policial que resulta arriesgado y único. Hay una re escritura de nuestra historia reciente que no se atrapa en una estética predeterminada, sino que —al igual que la película El Tío— busca y obtiene una forma de representación propia que se adecúa a lo que se quiere contar.El Guillatún
El documental Pena de Muerte, ganador del Festival de Cine de Viña del Mar en el año 2012, se exhibe gracias al proyecto Miradoc en Santiago, Iquique, La Serena, Valparaíso, Chillán, Concepción, Valdivia y Punta Arenas. Del 7 al 30 de noviembre a las 19:15 hrs. en Cineteca Nacional. Entrada general $2.000; Estudiantes y 3ra edad $1.000