El documental The Square muestra las protestas del pueblo egipcio desde el 2011 hasta mediados de 2013 en la ciudad de El Cairo, especialmente en la plaza Tahrir.
La documentalista Jehane Noujaim se interna en la céntrica plaza egipcia y a través de tres personajes (Ahmed, Khalid y Magdy) muestra las distintas visiones que existen acerca del proceso revolucionario.
Al inicio de la película es evidente la unidad de quienes protestan en las calles, representada por la petición de renuncia del dictador Hosni Mubarak. Pero después de que se hace efectiva la salida del dictador egipcio, comienzan las diferencias de opinión, los intereses particulares y la lucha por el poder, sea en la calle o en los medios.
De esta forma, con el poder en manos de los militares, se inicia una segunda etapa en la que los revolucionarios deben ponerse de acuerdo respecto a qué tipo de organización política aspiran y cómo construirán la Constitución que la sustente. De forma inmediata se forman dos grupos, Los Hermanos Musulmanes y el resto de los revolucionarios. Si en los primeros minutos era el diálogo entre iguales lo que llenaba la pantalla, en este nuevo escenario son los insultos y los gritos los protagonistas.
El documental, además de situarse en un lugar y un momento histórico, tiene la virtud de mostrar la visión de la gente de a pie, los ciudadanos comunes. La realizadora se mueve «cámara en mano» por la plaza buscando, más que planos perfectamente estilizados —que los hay—, las ideas y las palabras de quienes participan de la revolución pacífica. Si bien hay bastantes imágenes de enfrentamientos con la policía y los militares —cuestión que reafirma el valor del equipo de rodaje— el énfasis está puesto en otro lado. Así, en un enfrentamiento de los rebeldes con la policía, la directora prefiere cerrar el plano y quedarse con la imagen de Ahmed, que ya lejos del diálogo y los consensos, toma algunas piedras y comienza a lanzarlas. Sin duda debe ser uno de los mejores momentos del documental, ya que somos espectadores de todo el proceso de barbarización del ser humano tras la pérdida del entendimiento a través de la palabra.
Otro tema importante que recoge la película, es la forma que deben implementar los rebeldes para traspasar el bloqueo comunicacional de los medios tradicionales. A través de videos en Youtube y publicaciones en Facebook, entregan la información que los gobernantes no desean que se publique. Cuestión que no sucede solo en Egipto, sino que ocurre en este mismo momento en países como Venezuela, Ucrania y Rusia, por nombrar algunos. Lo anterior, ya no es un indicio de cómo serán las comunicaciones en unos años, sino que es el ejemplo de cómo ocurren en la actualidad y, además, plantea desafíos —sean genuinos o no— a los gobernantes y ciudadanos para manejar de forma cotidiana estos medios.
Además de la importancia que merece The Square como obra de arte, tiene una historia comercial que la vuelve única, pues esta es la primera película nominada a los premios Oscar (la película disputó el premio al Mejor Documental) cuyo estreno ha sido exclusivo en internet. Netflix, en una inteligente maniobra, compró los derechos de la película, al ver las posibilidades que ésta tenía de estar nominada en los premios de la Academia.El Guillatún