Una comedia delirante y obra para un espectador alternan en Teatro del Puente

Los Contadores Auditores proponen una divertida crítica social sobre la clase alta con la obra Safari para divorciadas. Mientras que el colectivo Gamera reflexiona en un lenguaje experimental en torno a la experiencia subjetiva del deseo.

Un grupo de mujeres chilenas de clase alta viaja a algún país de África a un safari que es al mismo tiempo una novedosa y exclusiva terapia post divorcio. Encima de los conflictos que naturalmente se suscitarán entre estas particulares mujeres, una de ellas será raptada por una banda de guerrilleras separatistas con el fin de atraer la atención de la prensa. Las mujeres restantes deberán sobreponer sus intereses personales y aprender a trabajar como un equipo para rescatar a su compañera y volver a casa.

Safari para divorciadas habla de un Chile en terapia, un Chile en el que, a pesar del supuesto crecimiento económico, sus habitantes no son capaces de reconocerse como miembros de un colectivo, un país donde lo único importante pareciera ser la superación personal, el bienestar físico y el éxito profesional.

Es una delirante comedia negra sigue la línea de montajes como La tía Carola y Los dinosaurios desaparecidos, parodiando mediante el absurdo a ciertos grupos de la sociedad chilena. Un espejo del Chile de los libros de autoayuda, de las rutinas de belleza, del agua de rosas y la leche virginal, de las revistas de papel couché y las clases de pilates. Un Chile que se cree primermundista y aún esconde la basura debajo de la alfombra.

En el gabinete del Teatro del Puente, desde el viernes 2 y hasta el sábado 31 de mayo, se presentará la obra para un espectador Parafilias indómitas, la cual reflexiona en un lenguaje experimental entorno a la experiencia subjetiva del deseo. La obra es una creación del colectivo Gamera, equipo interdisciplinario que busca replantear la relación obra-espectador con el uso de diferentes formatos artísticos.

En esta pieza se propone una puesta en escena que invita al espectador a tomar el rol de voyerista, conducta parafílica en la que el observador busca un deleite sexual a partir de la contemplación de variados estímulos eróticos. Por medio de 5 visores y unos audífonos, tendrá que decidir si ponerse los audífonos, por qué visores observar y qué parafilia desea durante su estadía. Tiene una duración de 5 minutos, y el ingreso es por orden de llegada previa inscripción.