Fama

Concebida como una reinvención del icónico film homónimo ganador del Oscar a la Mejor Música y a la Mejor Canción originales, dirigido por Alan Parker en 1980, en el que se basa, la actual versión de Fama hace foco en un talentoso grupo de bailarines, cantantes, intérpretes y artistas a lo largo de sus cuatro años de formación en la High School of Performing Arts de Nueva York (Conservatorio de Artes Escénicas). La renombrada casa de estudios, en la cual estudiantes de todos los estratos sociales encuentran la oportunidad de hacer realidad sus sueños y de obtener fama real y duradera… De la que se consigue únicamente con talento, dedicación y disciplina.

El film transcurre en una atmósfera altamente competitiva, caracterizada por las dudas que cada uno de los estudiantes tienen sobre sí mismos, y en la cual la vocación y la pasión de cada uno serán puestas a prueba. Además de dedicarse a su crecimiento artístico y sus logros, todos deberán enfrentarse a lo característico de esa época de sus vidas: un período de intensa tarea pero también de amistades profundas, incipientes romances y autodescubrimiento.

Inspirada en el multipremiado film de Alan Parker con sus imágenes emblemáticas de estudiantes que bailaban en los taxis y el tema principal de la película que se convirtió en un hit internacional cantado por Irene Cara, la actual Fama se inspira en aquel film de 1980, éxito absoluto de crítica y de público. Nominada a seis Oscars, la película ganó dos de ellos, pero continuó además sostenida por la demanda de sus fanáticos durante dos décadas más, como serie de televisión producida entre 1982 y 2003, como un musical en Broadway que tuvo su gira mundial y un Reality Show precursor de “American Idol” y todos los de formato similar posteriores. Treinta años después, otra generación de futuros artistas se calza los mismos zapatos de Tap Dance, se sienta al piano o agarra un micrófono para hacer lo suyo a la manera de estos tiempos pero con el mismo espíritu de los ’80.

Fama es una marca en sí misma y actualmente suma un valor agregado en un mundo en el que dominan los Reality Shows y la popularidad instantánea y efímera a la que se acostumbró la generación de YouTube, al mostrar sus vidas en cámara y ser vistos en la web por miles de observadores. A estos “quince minutos de fama”, se opone precisamente Fama, con su concepto de “transpirar la camiseta” para obtener los logros deseados mediante el talento potenciado por la disciplina y la práctica continua. El talento y el esfuerzo, como opuestos a la figura de las “instant celebrities”.

Para actualizar Fama insuflándole una energía moderna y un aire verdaderamente nuevo, los productores eligieron como director a Kevin Tancharoen, coreógrafo, bailarín, productor y director de televisión de 24 años, quien, al igual que sus personajes en el film, tuvo que pasar por un casting para convertirse en el realizador seleccionado. Luego de entrevistar a 30 o 40 directores, la producción quedó impresionada no sólo por sus coreografías sino por su modo de filmar las escenas dramáticas y de danza, que determinaron que participara, sin importar su juventud ni el hecho que Fama fuera su primera película para cine. Además de su formación, una mezcla de música, danza y cultura pop, Tancharoen tiene la perfecta combinación de experiencia para dirigir un film como este. Formado como bailarín desde la infancia, es además hijo de un encargado de transportes de filmación por lo cual se crió en sets de filmaciones como por ejemplo la de Batman Regresa; una de las que más lo impresionó como niño. Su decisión al tomar el proyecto fue: “recapturar el núcleo de la idea original y mezclarlo con nuevos estilos de danza y presentación. No solamente las coreografías, sino las historias detrás de ellas debieron ser actuales”. Según el director, el elenco de nuevos talentos que participan en Fama, de algún modo está viviendo realmente lo que reflejan sus personajes en pantalla, lo cual le aportó al film honestidad y permitió una inmediata identificación afectiva por parte de los espectadores”.

Para interpretar a los profesores, se tuvo especial cuidado en seleccionar a un grupo de actores y actrices probados en distintas áreas: cine, televisión, teatro y estudios de grabación musical; todos capaces de expresar la versatilidad y multiplicidad de carreras que enseñan sus personajes en el film.

Debie Allen, que en la versión de 1980 interpretó a la profesora de danza Lydia Grant y que continuó con el personaje en la serie de televisión, regresó como la directora Angela Simms. Para la actriz, Simms es como “una reencarnación de Lydia Grant casada y convertida en señora”. Directora a su vez de la Academia de Danza Debbie Allen, la intérprete le aportó al nuevo rol mucho de su experiencia personal actual. Y en el caso de Charles S. Dutton, quien interpreta al instructor de actuación James Dowd, también lo personal influyó en la actuación, ya que también dio clases en un conservatorio de Baltimore, en el que dos de sus alumnos fueron Jada Pinkett Smith y Tupac Shakur.

Con una banda sonora impactante y elaborados números musicales, Fama contiene algo de la música original a modo de homenaje, pero parte fundamental de su renovación fue contar con música especialmente compuesta para el nuevo contexto en el que transcurre el film. Se añadieron seis nuevas canciones y la producción contrató a The Matrix, uno de los más importantes grupos de producción musical actual, compuesto por Scott Spock, Lauren Christy, and Graham Edwards. Responsables de los mayores éxitos de cantantes como Christina Aguilera, Busted, Hilary Duff, Avril Lavigne, McFly, Jason Mraz, Ashley Tisdale, Shakira, Britney Spears, and Skye Sweetnam, son también compositores y han estado nominados siete veces a los premios Grammy.

Para respaldar la credibilidad de los distintos estilos de danza que aparecen en Fama: ballet, tap, jazz, danza moderna y gimnasia rítimica, la producción contrató a Marguerite Derricks, coreógrafa multipremiada con films en su haber como Little Miss Sunshine, El gurú del sexo, Señor y Señora Smith, o El hombre araña 3, entre otros.

Los interiores de Fama se filmaron en su mayoría en Los Angeles y los exteriores en Nueva York, en Manhattan.

El vestuario fue creado además para cada uno de los personajes con colores que resaltaran la personalidad de cada uno, y resaltaran sus características individuales.

La High School of Music & Art and Performing Arts de Nueva York.

Conocida popularmente desde la década del ochenta como la escuela de Fama, la High School of Music & Art (Conservatorio de Musica y Arte) fue fundada en 1936 por el entonces Alcalde de Nueva York, Fiorello H. LaGuardia. El intendente creó la escuela para que los alumnos más dotados y talentosos de las escuelas públicas de la ciudad pudieran desarrollar su creatividad y recibir al mismo tiempo un programa académico educativo. El conservatorio de Artes Escénicas se fundó en 1948, para entrenar a estudiantes profesionalmente en las carreras de baile, música o teatro. Ambas instituciones se fusionaron en 1961, antes de su mudanza a un edificio en el Lincoln Center. Esta se produjo en 1984 y las dos escuelas pudieron convivir también en un mismo lugar físico. En honor a su fundador, la nueva escuela fue llamada: la Fiorello H. LaGuardia High School of Music & Art and Performing Arts.

La escuela fue la primera en los Estados Unidos que ofreció educación pública gratuita a estudiantes destacados en las artes. La admisión se produce en base al potencial y a los resultados obtenidos en un ingreso altamente competitivo, y teniendo en cuenta sus notas previas. Para mayor información se puede consultar la página: www.laguardiahs.org.

Algunos de los muchos ex alumnos destacados de LaGuardia fueron: Jennifer Aniston, Ellen Barkin, Adrien Brody, Dom DeLuise, Eartha Kitt, Melissa Manchester, Liza Minnelli, Al Pacino, Wesley Snipes y Suzanne Vega, entre otros.

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