Apología a la libertad de pensar
Hannah Arendt, de Margarethe Von Trotta.
Yo quería confrontarme con las problemáticas ligadas a la realización de un film sobre una filósofa. ¿Cómo mirar, filmar una mujer que tiene como actividad principal el pensamiento?
Margarethe Von Trotta, 2012
El último film de la alemana Margarethe Von Trotta ha sido objeto de varias recompensas. Por ejemplo ganó el premio del jurado oficial, del público y de los estudiantes en el Festival Internacional del Film de Historia de Pessac (Francia) en 2012, y participó en el Festival Internacional del Film en Toronto.
La película de Von Trotta narra un momento específico en la vida de la filósofa, sin intentar realizar una biografía detallada de su vida. La historia comienza cuando la filósofa judío-alemana Hannah Arendt deja su vida de exiliada en Nueva York y de académica en Princeton, para ir a Jerusalem a cubrir para el New Yorker el juicio al ex–oficial de la SS Adolf Eichmann, responsable de la deportación de millones de judíos. Los artículos que Arendt publica a raíz de este tema y su teoría sobre «La banalidad del mal» generan una controversia sin precedentes. Su obstinación y la exigencia de su pensamiento se ven afectados por la incomprensión de sus próximos y provocan su aislamiento.
Para relatar el juicio a Adolf Eichmann, Von Trotta muestra imágenes reales que permiten al espectador conocer las ideas y las justificaciones de un criminal como éste, y al mismo tiempo, entender los argumentos con los cuales Arendt concibe su teoría sobre «la banalidad del mal».
A través del film Von Trotta intercala flash backs del pasado, donde Arendt es joven y tiene un romance con su profesor, el filósofo alemán Martin Heidegger escritor de Ser y Tiempo, quien más tarde adhiere al partido nazi. Si bien la realizadora no profundiza en esa relación, forma parte del imaginario que rodea a la filósofa.
Sin embargo, la película de Von Trotta nos deja con gusto a poco, puesto que uno quisiera ahondar mucho más en la vida de Hannah Arendt. Von Trotta en cambio, sólo nos muestra pasajes de sus últimos años, como la relación de esta filósofa con los otros judíos, sus alumnos de Princeton, sus colegas filósofos y su esposo Heinrich Blücher.
La actriz Barbara Sukowa que encarna a Hannah Arendt ha protagonizado otras películas de Von Trotta, como Rosa Luxemburg (1986), Los años de plomo (1981), y Vision – Aus dem Leben der Hildegard von Bingen (2009).
Yo quería igualmente intentar descubrir la mujer que se escondía detrás de esta gran filósofa independiente. El hecho de ser judía la obligó a abandonar Alemania, así es como su historia se asimila a un tema recurrente en mis films: ¿Cómo una persona reacciona frente a los eventos históricos y sociales sobre los cuales ella no tiene ninguna influencia o manejo?
Margarethe Von Trotta, 2012