Coreógrafo francés Mathieu Guilhaumon es el nuevo director artístico del BANCH
Su destacada trayectoria y proyección artística, su sólida experiencia internacional, su formación en el American Dance Center de Nueva York, en la escuela Rudra Béjart en Suiza, y su colaboración como coreógrafo invitado en la Ópera de París y en la Ópera Nacional del Rhin, fundamentan su nombramiento en la dirección del Ballet Nacional Chileno por el periodo 2013-2016.
Mathieu Guilhaumon tuvo un primer contacto con los bailarines en enero de este año cuando inició el proceso de montaje de su primera obra para el BANCH, «Añañucas», basada en una leyenda del norte chileno, que se estrenará el próximo 25 de septiembre.
«El gran potencial artístico de los miembros de la compañía, el dinamismo y la férrea voluntad de dar un nuevo aire a la estructura, fueron elementos determinantes que motivaron mi deseo de poder ocupar el puesto de Director Artístico del BANCH», señala Mathieu Guilhaumon, recientemente elegido en este cargo por el periodo 2013-2016. El bailarín y coreógrafo francés fue nombrado por el Director del Centro de Extensión Artística y Cultural de la Universidad de Chile, CEAC, Ernesto Ottone R., decisión que fue ratificada por el Rector de la Universidad de Chile, Prof. Víctor Pérez.
Mathieu Guilhaumon (34) se formó en el Conservatorio Nacional de Danza de Perpignan (Francia), en el Centro de Danza Norteamericano Alvin Ailey en Nueva York y en la Escuela Rudra Béjart en Lausanne. Su experiencia profesional en los últimos diez años la ha desarrollado como bailarín y coreógrafo al interior de compañías como, Groupe 13 de Maurice Béjart, el Stadttheater Bern (Suiza), Theater Augsburg (Alemanía), Opera National du Rhin (Francia) y Opera National de Paris. «Esta labor me ha permitido por un lado, desarrollar una escritura coreográfica singular así como el conocimiento del complejo funcionamiento de grandes instituciones tanto públicas como privadas. A partir de este aprendizaje, deseo poner a disposición del BANCH mis capacidades y competencias en pro de la realización de este proyecto artístico», afirma.
El artista, que acaba de colaborar con la régisseuse Mariame Clément para la producción de la ópera «Hänsel y Gretel» de Humperdinck en la Ópera de Paris, y de estrenar con el Ballet de la Ópera Nacional del Rhin su obra «Peer Gynt», se encuentra en el país preparando el montaje de su primera creación para el Ballet Nacional Chileno, «Añañucas», basada en una leyenda del norte chileno, que se estrenará el 25 de septiembre. Su primer contacto con la compañía lo tuvo en enero de este año cuando comenzó el trabajo de montaje de «Añañucas», logrando un positivo acercamiento y logros artísticos que lo motivaron a aceptar el desafío de asumir la dirección. «Ese primer encuentro de trabajo con los bailarines del BANCH me permitió descubrir un grupo de artistas curiosos y deseosos de impregnarse de nuevas formas coreográficas», afirma.
LOS EJES DE UN PROYECTO
Mathieu Guilhaumon proyecta para los próximos tres años un trabajo junto a la companía en el que la calidad y la notoriedad serán el sello principal. «Mi experiencia en compañías nacionales de otros países me ha demostrado que es la alianza entre la libertad creativa y el sentido de las responsabilidades lo que sustenta la dirección del destino de un conjunto. Ésta es la línea de conducta que yo deseo tener en el marco del proyecto artístico 2013-2016», dice.
El segundo eje del proyecto de Guilhaumon es el de dar continuidad y permanencia a la acción del BANCH en la ciudad, la región y país. «Trabajaremos al interior de la propia Universidad y su escuela de danza, realizaremos giras nacionales con presentaciones y talleres prácticos en torno a la danza en colaboración con estructuras culturales locales y ofreceremos funciones escolares destinadas a formar el público del mañana», adelanta.
El tercer eje apuntará al desarrollo internacional. «El objetivo es constituir una red coreográfica entre Chile y el extranjero. En este contexto, deseo desarrollar, por una parte un programa de intercambio abierto hacia el extranjero, ya sea integrando nuevas propuestas artísticas, colaborando con otros operadores culturales internacionales, generando alianzas en coherencia con las políticas culturales (institutos binacionales), y evidentemente, yendo hacia el público. Asimismo permitir que el BANCH presente y promueva su repertorio fuera de las fronteras a través de giras internacionales».
El proyecto, dice, «apunta a lograr cambios estructurales y metodológicos que permitan plantear las hipótesis de un ballet más sólido y en mejor sintonía, en el amplio sentido del término, con su entorno».
En cuanto al repertorio, Guilhaumon afirma que en los próximos tres años irá junto al BANCH tras un programa artístico que mezcle creaciones inéditas y reposiciones. Manifiesta también su deseo de establecer una colaboración estrecha con la Orquesta Sinfónica de Chile, considerando que la música y la danza son dos elementos indisociables. «Quiero igualmente invitar a creadores de alta calidad de la escena nacional e internacional a trabajar con el BANCH. Mis diversas experiencias como bailarín y coreógrafo a través del mundo me han permitido generar una red artística de contactos que pondré al servicio de la programación del ballet».
Además pretende incorporar progresivamente grandes obras maestras de relevantes coreógrafos del repertorio moderno, como una forma de proponer tanto a los intérpretes como al público los fundamentos de la danza contemporánea actual.